
Arena y Basura
Con éstas actividades el medio ambiente pierde como quiera.
Es sorprendente con el descuido que nuestra sociedad trata y maltrata el medio ambiente.
Quizás es por él desenfado heredado de los primeros habitantes de la isla que existiendo en poblaciones mínimas en comparación a las nuestras de hoy y por tanto en gran abundancia de los recursos que los rodeaban.
Esta actitud continua a travez de la colonia y hasta nuestros días, parece que solo debemos extender la mano para que el proverbial coco caiga o querríamos tomar el abundante mango bajito.
Hasta un barrio de nuestra capital lleva el nombre de Matahambre por el extenso bosque de mangos que existía allí y dónde por la abundante presencia de frutos, muchos iban a comer sus frutos cuando el hambre apretaba. Pero en nuestros días ese bosque ya no existe y de él solo queda el nombre y los multifamiliares de concreto que lo reemplazaron.
Si persistimos en consumir o explotar nuestros abundantes recursos sin pensar en consecuencias, otros bosques o canteras o recursos diversos también desaparecerán.
De nuestros mas bellos, interesantes y frágiles tesoros naturales sin dudas son las dunas de la zona costera este de la provincia Peravia, hoy día denominadas Reserva Científica Monumento Natural Félix Servio Ducoudray, o simplemente Las Dunas de Bani..
Sus grandes montañas de arena se yerguen frente a los vientos del Mar Caribe mientras varios tipos de mangles juntos a reptiles, aves acuáticas y la una vez abundante vida marina habitan la Bahia de Las Calderas, un escenario magnifico con las arenas acompañadas de samanes, aceitunos y bayahonda tejidos como un sistema indestructible y perenne.
Pero el peligro asecha, tanta arena parece que esta allí para que vayamos a tomarla, nadie mira, pocos se quejan… y ya que vamos allí… dejamos desechos de nuestra existencia.
El negocio perdedor, llevamos basura a las dunas y nos llevamos la arena, la foto muestra como funciona, una volqueta entra a las dunas y de reversa la llenan mientras otra llega y deposita basura entre lo que queda de ellas, así queda la cicatriz del hecho.